Después de varias semanas de negociaciones entre el Estado y los accionistas de la planta de níquel en el norte de la isla principal de Nueva Caledonia, explotada por Koniambo Nickel SAS (KNS), se tomó la decisión de poner en funcionamiento la planta y comenzar una fase de transición de seis meses. Un período de tiempo que debería permitir encontrar un comprador para las acciones del grupo anglosuizo Glencore en el proyecto (49%, siendo el otro accionista la propia Provincia del Norte). “La búsqueda de compradores es fundamental y estamos dispuestos a apoyarla”indicó, el lunes 12 de febrero, el despacho del ministro de Economía, Bruno Le Maire.
Fue la filtración, el lunes, de una nota interna en las redes sociales lo que aceleró la comunicación del industrial. En un comunicado de prensa del martes 13, Neil Meadows, presidente de KNS, anunció que las negociaciones entre los accionistas y el Estado no habían permitido encontrar ningún acuerdo “Solución alternativa aceptable para Glencore”.
El presidente anuncia la decisión tomada en la asamblea general, el mismo día, de suspender actividades manteniendo » caliente « las instalaciones. El objetivo de KNS es reiniciar la actividad tan pronto como llegue un posible nuevo socio.
La dirección también garantiza que, durante este período, se mantendrán todos los puestos de trabajo directos de KNS. KNS representa 3.701 puestos de trabajo (1.319 empleos directos, 1.457 empleos indirectos y 925 empleos inducidos), cuyas contribuciones son vitales para la supervivencia del fondo de seguridad social de Caledonia. Hoy en día, lo único que sigue siendo incierto es el género de los subcontratistas. En los próximos días se celebrarán reuniones individuales con la dirección.
“Altos costos operativos”
“A pesar de la asistencia ofrecida por el gobierno francés, los altos costos operativos y las actuales condiciones muy débiles del mercado significan que KNS sigue siendo una operación no rentable”, justificó Glencore en un comunicado de prensa. La empresa anglosuiza recuerda que ha comprometido 4.000 millones de dólares desde 2013 y que se han gastado casi 9.000 millones desde el inicio del proyecto sin que la fábrica haya alcanzado el umbral de rentabilidad.
Ante la Asamblea Nacional, el 6 de febrero, en respuesta al diputado renacentista de Nueva Caledonia, Nicolas Metzdorf, el Ministro de Economía detalló la propuesta que hizo a Glencore: “60 millones de euros en subvenciones al precio de la energía, 45 millones de euros en recursos adicionales, un préstamo de 100 millones de euros. »
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