El Real Madrid solicitará un tercer préstamo para las obras del Santiago Bernabéu de hasta 370 millones de euros, según aprobó este sábado la Asamblea Extraordinaria de Socios Compromisarios con un apoyo casi unánime (1.569 votos a favor, 38 abstenciones y 25 en contra). Este crédito eleva, de momento, la financiación a los 1.170 millones para acometer la reforma del estadio. En 2018, pidió uno de 575 millones y en 2021, otro de 225.
El coste de la remodelación del recinto se cifró, en un principio, en 525 millones. Posteriormente, acudió a las instituciones financieras para sufragar el coste del invernadero (225), que no estaba en el proyecto original, una enorme bodega subterránea que permite guardar el césped cuando no hay partido y multiplicar, si se cumplen los planes comerciales, los días de explotación del recinto con la celebración de otros eventos. “Este es un invento mío”, proclamó el presidente, Florentino Pérez. Y ahora llega la tercera línea de crédito, de 370 millones.
El máximo dirigente argumentó que el presupuesto y los plazos de ejecución han aumentado por causas ajenas, como el incremento de precios por la guerra en Ucrania, la pandemia o la subida de precios de la energía, y también por obras de mejora o no previstas en un inicio. Entre las mejoras que se acometerán con este tercer préstamo, Pérez señaló el videomarcador, la acústica, iluminación, pantallas audiovisuales, una sala de control de eventos, espacios comerciales y salas vip.
Hasta el pasado 30 de junio, el Madrid había gastado en las obras 892,7 millones: los 800 de los dos primeros créditos y otros 92,7 de fondos propios. El primer préstamo lo obtuvo a un interés fijo del 2,5%; y el segundo (también de tipo fijo), por debajo del 2%, según se apuntó en la asamblea de hace dos años. Esta vez, no se concretó el interés del tercero. El presidente, Florentino Pérez, aseguró que la financiación tendrá “unas condiciones muy favorables” y añadió que la entidad pagará en torno a 60 millones anuales por los 1.170 millones de los tres créditos, a un 3% de media de tipo fijo. “Es menos de la mitad de los nuevos beneficios anuales que tendremos tras la conclusión de las obras”, puntualizó el máximo dirigente. A finales de julio, el Madrid ya abonó la primera amortización, de 33,8 millones (la mitad de ellos, intereses).
El aforo final quedará en torno a los 80.000 espectadores y, aunque durante la larga mañana de asamblea se deslizó que a finales de 2023 ya estarían terminados la mayoría de los trabajos que empezaron hace cuatro años, no se concretó ninguna fecha de inauguración oficial, ni siquiera orientativa. Florentino Pérez insistió en que el nuevo estadio se convertirá en “uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad” y el principal centro de grandes eventos de Europa.
Contra Tebas
En el capítulo de cuentas, no hubo sorpresas y fueron aprobadas todas por abrumadora mayoría. Los ingresos de la temporada pasada ascendieron a los 843 millones, por encima de los niveles prepandemia (757 en la 2018-19), con unos beneficios de 11,8 millones. Para la 2023-24 están previstos unos ingresos de 939 millones, un ascenso que el vicepresidente tercero, Pedro López Jiménez, imputó a la explotación del estadio. Los beneficios se estiman en 6,4, la mitad que la campaña anterior.
El nuevo crédito para financiar las obras del Bernabéu fue el punto central de la asamblea extraordinaria. Antes, en la ordinaria, el presidente blanco volvió a defender la Superliga, cargó contra la UEFA y LaLiga de Javier Tebas, y llamó la atención su petición al Gobierno central para que tome medidas que “regeneren las estructuras del estamento arbitral”.
“Nadie sabe quiénes trazan las líneas del VAR y cómo. Confío en que actúe el Gobierno de España”
Florentino Pérez
“Nadie sabe muy bien quiénes trazan las líneas del VAR y cómo. No se entiende cómo no vemos en muchos casos la imagen completa del fuera de juego. Se ven las líneas que alguien traza por un lado y no vemos el momento exacto del pase de un jugador. Es lo que está generando más dudas sobre el arbitraje español y la aplicación del VAR. Confío en que actúe el Gobierno de España. Es más urgente que nunca por el bien de nuestro fútbol porque la credibilidad de nuestras competiciones está muy deteriorada”, protestó Florentino Pérez durante su largo discurso inicial de una hora y 20 minutos.
En este punto, no pasó por alto el caso Negreira, en cuya causa judicial el Madrid está personado. “No es normal que un club [el Barcelona] haya pagado casi ocho millones durante 20 años al vicepresidente de los árbitros españoles. Es un caso de enorme gravedad que está dañando la imagen del fútbol español. Confiamos en la justicia. Al final, todo se sabe”, subrayó el mandatario, que respondió a la expresión de “madridismo sociológico” de Joan Laporta con “madridismo sociológico universal”. “Eso sí existe, porque somos el club más seguido y con más Copas de Europa”.
Por aclamación
Cuando más se explayó fue en los ataques a Javier Tebas, a quien acusó de intentar expropiar el 11% de los derechos televisivos del Madrid durante 50 años con el acuerdo con el fondo CVC; de tratar de modificar la Ley del Deporte para apropiarse de los derechos comerciales del club e inhabilitarle como presidente (“PP y PSOE nos apoyaron”, matizó); y de querer explotar derechos televisivos que el club considera suyos, como la previa, los post partidos y el acceso a los vestuarios. “LaLiga no tiene límites”, exclamó sobre su viejo enemigo.
El próximo 21 de diciembre se conocerá la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea y el máximo dirigente merengue repitió los ataques contra la UEFA y su nuevo modelo de Liga de Campeones que entra en vigor el próximo curso; y los argumentos de que, si no se hace nada, “el fútbol no sobrevivirá” por falta de adaptación a los nuevos tiempos y falta de transparencia. También cargó contra el precio del fútbol televisado: “Cobrar 100 euros al mes no tiene sentido. Hay que modernizar la competencia”, dijo.
Al final de la mañana, la asamblea aprobó por aclamación (sin que los socios votaran de forma individual) que José Martínez Pirri fuera el nuevo presidente de honor, en sustitución del fallecido Amancio Amaro, y que la Ciudad Deportiva del Real Madrid sea llamada “Ciudad Real Madrid Florentino Pérez”, a la petición de más de mil socios compromisarios, según los estatutos del club. “Solo pido que se ponga el nombre cuando ya no esté”, cerró el presidente blanco.
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