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En Honduras, las últimas elecciones primarias han configurado un escenario político claro, aunque no falto de polémica. Los resultados iniciales proporcionados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) indican que Rixi Moncada, Nasry Asfura y Salvador Nasralla serán los aspirantes presidenciales por los partidos Libre, Partido Nacional y Partido Liberal, respectivamente.
De acuerdo con el informe más reciente del CNE, dentro del Partido Liberal Salvador Nasralla va a la cabeza con un 59.36 %, seguido por Jorge Cálix con un 29.91 %. Luis Zelaya acumuló un 5.59 % y Maribel Espinoza un 5.11 %. En cuanto al Partido Nacional, Nasry Asfura lidera con un 76.01 %, mientras que Ana García logró un 21.26 %, Jorge Zelaya un 1.85 % y Roberto Martínez Lozano un 0.86 %. En el Partido Libre, Rixi Moncada se ubica a la delantera con un 92.22 %, con Rasel Tomé obteniendo un 7.77 %. Esta información se basa en el análisis del 34.58 % del total de las actas.
Desafíos logísticos e irregularidades durante la jornada electoral
No obstante, el día electoral del 9 de marzo estuvo marcado por varias irregularidades. Se informaron violaciones a la cadena de custodia durante el transporte del material electoral, junto con acusaciones de fraude y sabotaje, así como el incumplimiento de cláusulas contractuales por parte de las empresas contratadas por el CNE. Estos eventos crearon un ambiente de tensión y desconfianza en el procedimiento.
Uno de los inconvenientes principales fue el retraso en la entrega de los materiales electorales en los centros de votación. En Tegucigalpa, más de 2571 Juntas Receptoras de Votos (JRV) enfrentaron demoras de entre 10 y 14 horas, a pesar de que en total el país cuenta con 24.800 JRV. El CNE señaló que los retrasos se debieron al incumplimiento de una de las compañías contratadas para el traslado de dichos materiales. Según un informe de la Red por la Defensa de la Democracia (RDD), hacia las 4:00 de la tarde, el 39 % de las JRV en Tegucigalpa reportaban problemas.
La situación generó descontento entre los votantes. En la Escuela República de Nicaragua, por ejemplo, las personas se retiraron del lugar debido a la demora en la llegada del material electoral, que finalmente arribó después del mediodía. En otros centros, el material llegó a altas horas de la noche, y las filas de votantes persistieron hasta altas horas de la madrugada.
El CNE culpó a la compañía Ingeniería Logística y Transporte S. de R.L. de C.V. por el incumplimiento en el transporte del material electoral. Se comunicó que la empresa fue informada de la adjudicación del servicio, que supera los 64 millones de lempiras, tan solo dos semanas antes de las elecciones. La presidenta del CNE, Cossette López, denunció un «retraso intencionado» y anunció acciones legales contra los responsables. El Tribunal Superior de Cuentas (TSC) también declaró que se iniciará una investigación de oficio.
Repercusiones, exigencias y ambiente de desconfianza después de las elecciones
German Lobo, exconsejero suplente del CNE, manifestó su inquietud por el mensaje de desconfianza que estos eventos transmiten a la población en relación con las elecciones generales. El analista Héctor Corrales, coincidiendo con el exconsejero del CNE, habló de una «confianza quebrantada en el proceso».
En la víspera de las elecciones primarias, también surgieron señalamientos de fraude. El movimiento ¡Vamos, Honduras! de Salvador Nasralla denunció supuestos intentos de fraude y publicó un audio en el que se refería a acciones destinadas a dañar los lectores biométricos. El fiscal general Johel Zelaya anunció una investigación al respecto.
Las elecciones primarias se llevaron a cabo bajo la suspensión de garantías constitucionales, en el marco del estado de excepción, una acción destinada a combatir el crimen organizado que ha suscitado críticas por presuntos abusos de las fuerzas de seguridad del Estado.
La presidenta del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), Anabel Gallardo, subrayó la notable participación en las elecciones primarias y solicitó una investigación exhaustiva sobre las irregularidades. El COHEP recordó que las Fuerzas Armadas son las encargadas de la custodia, transporte y vigilancia del material electoral y requirió un informe detallado de los incidentes, así como una investigación por parte del Ministerio Público.
La Cámara de Comercio e Industria de Cortés (CCIC) expresó su fuerte condena ante los retrasos en la distribución del material electoral y exigió a las autoridades correspondientes una investigación inmediata para establecer responsabilidades y prevenir la repetición de estas irregularidades.
El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), Daniel Fortín, demandó que las Fuerzas Armadas y el CNE proporcionen una explicación y solicitó que estos inconvenientes no se repitan en las elecciones generales de noviembre. Fortín destacó que la masiva participación ciudadana en los centros de votación transmite un mensaje claro: en el país nadie se deja. Expresó su deseo de que para las elecciones generales de noviembre todo sea claro y se sepa cómo será el proceso.
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